Las enfermedades ocurren cuando se consumen alimentos o se bebe agua con contaminantes peligrosos en cantidades suficientes para afectar la salud y algunos síntomas son diarrea, vómitos o dolores semejantes a los de una gripe, los que pueden comenzar desde unas horas hasta unos días después de ingerir el alimento o agua contaminada, detalló la cartera sanitaria.
Estos síntomas varían en función de la cantidad de bacterias o de toxinas presentes en el alimento; de la cantidad de alimento consumido y del estado de salud de la persona.
Para las personas sanas, la mayoría de estos trastornos alimenticios sólo duran un par de días y no presentan complicaciones pero para las personas más susceptibles como los niños, los ancianos, las mujeres embarazadas y los que padecen otras patologías pueden ser más severas, dejar secuelas o incluso provocar la muerte.
Por ello el Ministerio de Salud recomendó durante las compras de alimentos por las Fiestas comenzar con los productos envasados y dejar para el final los perecederos y al elegir el establecimiento donde adquirir los productos tener en cuenta el orden y limpieza de las instalaciones y la temperatura de las heladeras
En caso de adquirir carne picada, hay que comprar la que fue procesada en el momento y consumirla de inmediato, mientras que hay que controlar las fechas de vencimiento de todos los productos.
La cartera no recomienda comprar alimentos preparados que se exhiban a temperatura ambiente, ni permitir que vendan el pan sin guantes o luego de haber manipulado dinero.
Al manipular alimentos, el Ministerio de Salud aconsejó no mezclar alimentos crudos y cocidos, guardar en la heladera y tapados aquellos alimentos que no van a ser sometidos al calor antes de ser ingeridos.
También lavar las verduras y las frutas antes de ubicarlas en la heladera y al abrir una lata de conserva, transferir todo el contenido a un envase de vidrio o de plástico.
También evitar la contaminación cruzada, utilizando distintos utensilios para manipular los alimentos crudos y los cocidos y no volver a congelar un alimento que ya fue descongelado, pues ello favorece la contaminación con microorganismos.
Al cocinar -señala el informe- la cocción completa se logra cuando los alimentos alcanzan una temperatura interna superior a los 70º C.
En este sentido, aconsejó cocinar las carnes y comidas que llevan carne picada o trozada hasta que no queden partes rojas o rosadas en su interior, mientras que los huevos deben cocinarse hasta que la clara y la yema estén firmes.
También cocinar el pescado hasta que esté opaco y se desmenuce fácilmente con el tenedor mientras que los rellenos deben colocarse inmediatamente después de prepararse en refrigeración o en un horno precalentado.
Al momento de comer, mantener la temperatura de los alimentos ya que las bacterias crecen entre los 5 y los 60 grados por lo tanto la comida debe permanecer el menor tiempo posible a temperatura ambiente.
Tampoco dejar alimentos cocidos y/o perecederos a temperatura ambiente durante más de dos horas y verificar que la heladera esté a cinco grados o menos y el freezer a -18 grados.
Además, en lugar de servir la comida en una fuente grande, es preferible colocar los alimentos en varias pequeñas para evitar que permanezcan mucho tiempo a temperatura ambiente.